Oración por ti, mi amigo

Amigo mío, debes de saber que te amo y tu vida me interesa. Es por eso por lo que he doblado mis rodillas por ti, clamando al Dios omnipotente que te guarde, que en todos tus asuntos te proteja. Le pido a Dios que te dé serenidad y te cobije con su luz, si es que hay tinieblas que quieran hacerte tropezar y la negra maldad con amargura quiera quitarte aquello que tú aprecias:

Señor dale a mi amigo paz, muéstrale que no lo has abandonado, que para él hay un propósito especial y para una misión tú lo has llamado. Derrama en él tu Espíritu divino, rodéalo de ángeles que en todos sus caminos peleen por él la cruel batalla por su vida. Que tu poder sane toda enfermedad, toda herida aún abierta del pasado. Sana su cuerpo, sana su alma, sana su mente, da a mi amigo una inesperada bendición que le muestre el Dios soberano que tú eres.

Señor te doy gracias por este bello ángel que has enviado a mi lado, porque aún a veces más cercano que un hermano está, puedo contar con él siempre, así Jesús como también cuento contigo.

Señor bendice a mi amigo amado.

Amigo, amiga, no te apartes jamás de Jesús.

Escrito por Hermes Alberto Carvajal

Recuérdalo: todos los días, una palabra de fortaleza para ti.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies