¿Por qué mis padres no confían en mí?

padresLos jóvenes siempre desean que sus padres les den más libertad. Ellos piensan que tienen derecho a salir cuando quieran a donde les plazca, sin que sus padres piensen que están planeando fugarse de casa.

Muchos jóvenes se sienten indignados al ser interrogados constantemente por sus padres. La manera en que los padres hacen las indagaciones de lugar acerca de sus hijos, suele ser un tanto policíaca. A los jóvenes no les gusta que los cuestionen con preguntas como: ¿Adónde vas? ¿Con quién iras? ¿A qué horas piensas regresar? ¿Qué harás? ¿Irás con ese “fulano”? Son preguntas que enloquecen a nuestros adolescentes. Sin embargo, como padres vemos estas preguntas como imprescindibles.

¿Cómo pueden los jóvenes ganarse la confianza de sus padres?

La confianza es algo muy delicado, es algo que no consigues fácilmente; pero la pierdes con extrema facilidad y para colmo, la confianza nunca es suficiente.

Los seres humanos pasamos por diferentes etapas. Primero, somos niños; y como niños aprendemos todo lo relacionado a esa hermosa etapa de nuestras vidas. Luego, nos hacemos adolescentes y es en esta etapa que aprendemos a ser adultos; cuando estemos listos, simplemente abandonaremos el hogar de nuestros padres y seguiremos adelante con nuestras vidas.


Por lo tanto, si deseas ganar la confianza de tus padres deberás:

Aprende a elegir tus amistades.

Los padres tienen una antenita que detecta cuál es el perfil de amigos —que a su entender— te conviene; por extraño que parezca, los padres rara vez se equivocan.

Debes demostrar que eres confiable.

Las personas a tu alrededor medirán si eres confiable por el grado de responsabilidad que tengas. ¿Qué tan responsable eres?

Habla la verdad.

Para ganarte la confianza de tus padres deberás de hablar siempre con la verdad. Nadie confía en un mentiroso/a. ¿Qué ganas con mentir sobre lo que en realidad haces? Tus padres y las personas que te rodean dudarán de ti todo el tiempo si dices que vas para un lugar y luego, te diriges a otro.

Cumple siempre tus promesas.

En ocasiones tus padres te descubrirán haciendo algo malo o indebido y harán que les prometas que no lo volverás a hacer. No los engañes prometiendo algo que jamás vas a cumplir, eso de verdad decepciona a cualquier padre.

Aparte de estas recomendaciones será bueno que también:

– Llegues a casa a la hora que te fijen tus padres.

– No seas impuntual, la impuntualidad exaspera a todos.

– Trata en lo posible de ser responsable con tus compromisos económicos.

– Usa el teléfono con moderación.

– Sé valiente y admite cuando te equivocas.

– Aprende a pedir perdón.

Ser un adolescente no es fácil, pues ya no eres un niño; pero tampoco eres un adulto. Por supuesto que es difícil de determinar cómo comportarte en una determinada situación. Aprende de tus padres, ellos te aman y desean lo mejor para ti. Aprovecha esta etapa de tu vida para que llegues a ser una persona madura preparada para enfrentar la vida como un adulto estable y confiable.

 

 

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