Nunca falta que alguno de nuestros vecinos sea el típico fiestero, que coloca música a todo volumen sin importarle la hora ni la molestia que ocasionan a sus vecinos, ¡De seguro estás pensando en su nombre ahora mismo! Algunas personas suelen resolver el problema yendo a hablar con el vecino fiestero o en caso extremo llamando a la policía.
En algunos países, las personas pueden terminar pagando multas con unidades tributarias muy elevadas, hasta cárcel por el simple hecho de mantener la música alta.
Pero, ¿Una granada?
En primer lugar, hay que pensar cómo una persona posee este tipo de armas en su casa común. Una granada es un artefacto explosivo que es utilizado por fuerzas especiales de seguridad a nivel mundial. La misma, es altamente peligrosa y acarrea heridos de gravedad, daños irreparables y hasta la muerte.
No es común que una persona posea una granada en la comodidad de su hogar. Pero esta vez, el señor Guillermo, habitante del Fraccionamiento Los Álamos, en el estado de Sonora, México; lo supo. Julio se lo había advertido. A éste último no le gustaba el exceso de volumen que siempre mantenía la casa de Guillermo. Sobre todo, con los corridos mexicanos y la música tex mes, que al parecer, no eran del agrado de Julio. Ambos hombres, dueños de las respectivas viviendas, sostuvieron una dura discusión verbal para negociar de la forma que conocían, el acuerdo de que por alguna vez en el día, Guillermo apagara la música.
Pasan las horas, pasan los minutos, Julio se está volviendo loco por el volumen alto de la música que proviene del patio trasero de la casa de Guillermo, camina de un lado a otro y sin aguantarlo más, va por artillería pesada. Se ubica frente a su alacena de objetos peligrosos y acciona una granada. Y sin mediar más palabra y con mucha decisión, lanzó la granada a la casa de Guillermo, haciendo que por fin la música deje de sonar.
Los agentes de Seguridad Pública explican que la granada dañó severamente las paredes del recinto, así como el techo, el portón del garaje y el techo. Y también, los objetos que se encontraban, así como el famoso y tan odiado equipo de sonido.
Las violaciones de leyes como la alteración del orden público, son leyes que pueden ser castigadas de distintas formas. Y las consecuencias en ocasiones, afectan a la persona intolerante, que en vez de acudir a la policía o a cualquier autoridad, prefiere castigar con sus propios medio el atropello.