Es posible que para ti también al igual que para miles de personas, puede parecerte difícil mantener la fe ante las dificultades, pero Dios no permitirá que desmayes, por eso cada día El renueva tus fuerzas, te recuerda tu propósito, y guía tu destino, este artículo o nota, es una prueba más de que EL está pendiente de ti, y no quiere verte «tirando la toalla».
Nuestra fe agrada el corazón de Dios, pero sin fe es imposible agradarlo. La incredulidad nos aleja de Dios, pero la fe nos conecta con un mundo sobrenatural en donde los milagros imposibles se hacen posibles y los sueños pueden hacerse realidad. Si enfrentas dificultades, tu fe es el arma que te ayudará a salir victorioso en todo.
Busca a Dios siempre de primero
Ya sea tu necesidad económica, física, emocional o espiritual , siempre busca a Dios primero. El Salmo 25: 15 dice “Yo siempre busco la ayuda del SEÑOR, porque sé que él siempre me salva del peligro”.
Si recibes un diagnóstico médico no favorable, si estás en una crisis económica, o tu matrimonio no está bien y necesitas un milagro, entonces acércate con confianza a Dios, ahi donde estés, en tu habitación, en tu auto, en cualquier lugar, Dios está ahí.
Mantener la fe ante las dificultades es lo único que puede ayudarnos a salir victoriosos, así que no dejes que las palabras del enemigo te llenen de dudas, aprender a vivir expectante, creyendo que Dios hará algo nuevo en tu vida.
Confía en Dios y no en tu propia lógica
A veces le pedimos un milagro a Dios, pero también dudamos. Muchas veces creemos que el Señor no puede con nuestra situación y queremos ayudarle, pero este es un grave error. Mantener la fe ante las dificultades es vital para el crecimiento espiritual.
Debemos confiar plenamente en Dios y no en nuestra propia sabiduría, debemos creer que él extenderá nuestros caminos, y no intentar ayudarle con preceptos que no vienen de parte de él.
Dios puede hacer que lo imposible sea posible, entonces no podemos dudar, debemos tener una fe intacta, que sea la que nos abra el camino para que su poder se manifieste.
Nuestra lógica nos hará ver lo humano, lo natural, pero nuestra fe nos hará ver todo de manera sobrenatural. No hay nada que Dios no pueda darnos, conforme a su voluntad y debes estar seguro de eso.
Deja a un lado el temor
El temor es el principal enemigo de la fe, y aunque el miedo es una respuesta normal de nuestro ser, debemos saber que el temor puede condicionarnos a vivir siempre en un ciclo sin salida, donde no hay fe ni esperanza.
El temor ha hecho que muchos hombres pierdan la visión, el camino, y los sueños. Por temor podemos perder cosas valiosas, incluso, perder el milagro que está ahí mismo enfrente de nosotros.
Pedro lleno de fe caminó sobre las aguas, pero en medio de ese acto de valentía tuvo miedo y empezó a hundirse. Así pasa con nuestras vidas, hay retos que asumimos como un desafío, pero después entra el temor y hace que perdamos todo lo que hemos alcanzado.
Hoy debes ser libre de todo temor, acuérdate siempre que para tener fe ante las dificultades, el temor no puede ser tu opresor, tu fe puede ayudarte a perder tus miedos.
Esfuérzate y sé muy valiente
No se trata de ser valiente bajo la perspectiva humana, se trata de ser valiente frente a la fe y a lo que Dios dice, confiando en su palabra.
Todos los días debes esforzarte por buscar a Dios, por ser más activo en tu fe, por no dejar que nada te mueva de lo que has creído, por avanzar y dejar que sea el Señor que guíe tus caminos, solo así podrás ver los sueños cumplirse.
