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La impotencia sexual en los hombres es un padecimiento muy común, pero sin embargo, es una de las enfermedades de la que se habla muy poco. Esto no es solo de los hombres hispanos, sino de todos los hombres del mundo. De modo que antes de comenzar con el tema de la impotencia es importante que el lector entienda cuál es la razón por la que nosotros los hombres evitamos confesar que tenemos impotencia sexual.
Esto es un estado mental masculino que representa la hombría de la cual el hombre mantiene muy cuidadosamente protegida. Nosotros los hombres sentimos orgullo de nuestras capacidades sexuales; de hecho se considera en encuestas realizadas, que la gran mayoría de los hombres están más interesados en complacer a su pareja sexualmente antes de satisfacerse así mismo. Ese no es el caso de la mujer. En otras encuestas las mujeres están más interesadas en ser más atractivas para su pareja, de modo que la mujer siempre está tratando de lucir hermosa ante los ojos del hombre. Ese es su orgullo.
Cuando un hombre viene a nuestra clínica
Algunas veces con la prisa y la demanda de tantos pacientes, los médicos llegamos a omitir acerca de la impotencia sexual y ese paciente se va a casa sin ninguna ayuda. Para un examen físico, la mitad de ellos lo que en verdad necesitan es un tratamiento para la impotencia sexual; de modo que hemos aprendido que cuando preguntamos a nuestros pacientes varones acerca de las relaciones sexuales, sorpresivamente encontramos que en realidad esa era la causa de la visita.
Así que ahora ya entendemos que la pena de hablar de la impotencia sexual es un problema natural, humano y muy entendible. La impotencia sexual tiene muchos orígenes y causas.
Existen razones congénitas y genéticas, en otras palabras, cuando el feto se está desarrollando puede tener un defecto con los testículos que no bajen a la bolsa del escroto (es un problema congénito) o puede ser un mal genético, en el cual por razones hereditarias existe impotencia sexual como es el síndrome de Klinefelter y otros más.
También hay otras causas de impotencia que son de causas adquiridas durante la vida, como es el uso del alcohol que se ha comprobado que encoge los testículos y finalmente los atrofia hasta que dejan de trabajar. Muchos de mis pacientes se asombran con esta noticia y la primera pregunta es; ¿Cuántas me puedo toma Doc para que no me pase eso? Y la respuesta es más bien relacionada a la cantidad y calidad de alcohol que se consume. Unas cervezas en manera esporádica, no es de peligro. El colesterol alto se puede depositar en las arterias que producen la firmeza del pene, pero si el flujo de sangre está limitado, también la firmeza del pene estará limitada. Otras causas de la Impotencia, son el uso de marihuana, tabaco, presión alta y por supuesto la diabetes, como una de las causas más frecuentes. Existen otras causas menos frecuentes como deficiencia de testosterona, que es la hormona masculina, o aún más como es el caso de traumas psicológicos que impiden la erección del pene.
¿Qué es la Impotencia sexual?
La impotencia es la inhabilidad del pene de obtener una erección lo suficientemente firme para poder penetrar la vagina. Esto puede ser dividido en partes como; tener una erección al principio, y después pérdida de la erección antes de producir la eyaculación. La frecuencia de la erección es muy variada y depende de la edad. Un hombre de 18 años puede tener hasta 20 erecciones en una noche, pero uno de 80 años puede tener una cada 6 meses. De modo que la frecuencia no necesariamente indica un problema de impotencia.
¿Cómo se cura la Impotencia sexual?
Solo hablaremos del tratamiento de las causas más comunes que son diabetes, presión alta, colesterol alto y uso de drogas.
Viagra, Levitra y otros medicamentos han revolucionado el tratamiento, ya que estos medicamentos son relativamente fáciles de usar después de un examen médico y su eficiencia es muy alta. Son utilizados en todos los pacientes con los padecimientos mencionados arriba. Otros tratamientos incluyen los implantes quirúrgicos con aditamentos que inflan el pene cada vez que así se desea. Este tratamiento ha sido muy exitoso en pacientes con severa obstrucción de las arterias o con atrofia testicular.
El tema de la impotencia sexual es verdaderamente un tema muy amplio y cada paciente puede tener un problema especial y un tratamiento único.
Dr. Javier Ríos