¿Cómo debemos enfrentar una tragedia?
Perder a una persona querida en un accidente u catástrofe, o por una enfermedad puede ser el desencadenante de sentimientos como Ira, depresión, ansiedad, tristeza y desasosiego.
Si no se tratan o se ignoran con el tiempo pueden llevar una depresión profunda y de carácter crónico.
El tiempo para superar una tragedia personal depende de cada quien. Hay personas que son naturalmente más fuertes emocionalmente y pueden recuperarse en unos meses. Mientras que a otros les lleva años de trabajo. Si piensas que perteneces al segundo tipo no te tortures o presiones para sentirte mejor, entiende que todos somos diferentes y reaccionamos de distinta manera ante las situaciones de la vida. La aceptación es el primer paso.
¿Cómo puede hacerse para superar un duelo de manera natural sin caer en la desesperación?
Apoyarse en seres queridos que puedan comprenderla situación y las diferentes etapas del duelo es muy importante para la persona afectada. Hablar, desahogarse y pedir consejo cuando es necesario contribuirá al alivio emocional.
Evitar reprimir los sentimientos, es importante aceptar si nos sentimos muy angustiados o enojados. Si los ignoramos pretendiendo que no están ahí, se harán más fuertes. Reconocer la sensación y decirnos a nosotros mismos que es parte de nuestro proceso de recuperación, hará que la emoción negativa se vuelva más débil.
Tratar de evitar el aislamiento. A veces es bueno salir con otras personas que nos escuchen y nos distraigan, aún si no tenemos ganas de hacerlo.
Aléjate de las drogas y el alcohol como medios para mitigar el dolor. Ten en cuenta que aunque consumas estas sustancias, solo te brindarán un alivio temporal. Te causarán una adición a largo plazo, y dañarán tu salud física y mental.
Inscríbete en cursos y actividades, esto evitará que caigas en el aislamiento y conocerás gente nueva. Mantente ocupado desarrollando tareas y proyectos personales. No pases demasiado tiempo acostado en la cama o uses el sueño como escape de la realidad. Descansa lo que consideres necesario, pero hacerlo demás puede llevarte a desarrollar fatiga crónica y sentirte desanimado.
Si has perdido a alguien querido por una catástrofe, evita ver las noticias o programas de televisión que hablen sobre ello. Esto sólo te recordará constantemente la pérdida. Es importante entender que como ser humano hay cosas que no puedes controlar y deben aceptarse como se presentan.
Unirse a grupos de apoyo dirigidos por personas que hayan superado las mismas circunstancias que tú. Muchos centros comunitarios o iglesias brindan estos programas gratuitamente. Orar y compartir experiencias con los demás te hará sentir mejor más rápidamente.
