Estoy contigo y muy pronto te lo voy a demostrar para que no te quede duda de que Yo Soy Tu Proveedor, yo escucho tu oración y conozco tu necesidad.
No tienes que temer, vives seguro y todo lo que para ti se ha profetizado se cumplirá. No habrá obstáculo ni enemigo que pueda detenerte, así que haz a un lado el desánimo y decídete a conquistar la tierra de tu bendición y tu prosperidad.
Aunque tú ya no necesitas que te pruebe cuánto te amo, eso ya lo sé. Hemos atravesado por tantas cosas juntos y veo como cada día te fortaleces en tu fe. Ve ahora, búscame en mi palabra y en tu corazón me sentirás.
Cierra tus ojos, guarda silencio, recíbeme, escúchame decirte TE AMO una vez más.
Porque en verdad TE AMO.
Te lo demuestro cada día plasmando mi amor por ti con maravillas, milagros y señales en todo el universo. Dándote vida, proveyendo el aire que respiras y extendiendo tus días para que me conozcas más.
Te daré más vida porque hay un propósito que tengo para ti y tienes que cumplirlo. No permitas que la duda te arrastre hacia el callejón oscuro de la inseguridad.
Tú puedes saber que te hablo con sinceridad y con verdad. Muchas veces te lo he demostrado, en los momentos en que todo parecía arruinado yo extendí mi mano y te rescaté, cuando todo parecía perdido, yo envié a mis ángeles para defenderte y de la derrota te salvé. Puedes sentirte seguro, pero no pierdas tu humildad, porque la soberbia será tu derrota y yo no te he bendecido tanto para que vuelvas atrás.
Te lo repito yo te amo, yo sé que tú me amas.
Háblalo, grítalo, escríbelo: ¡Dios te amo!
Amén.