Fija tu mirada en el plan de Dios para ti.
¿Tiene Él un plan de angustia y sufrimiento? NO. Pero vivimos en un mundo rodeados de dolor y pesar por todos lados. Si no ponemos atención en lo que oímos, escuchamos, comentamos, leemos y creemos pronto nos pudiéramos dejar enredar por la trampa del mundo: «No le creas a Dios, te va a ir muy mal, tu pasado te alcanzará», «Dios te va a castigar por lo que hiciste», «Tú no sirves para nada…» todas estas frases anteriores es lo que oímos cada día desde muchas fuentes y es lo que el mundo nos quiere dar de comer: palabras de pesimismo, y no se trata de que seas «positivo» SE TRATA DE QUE LE CREAS A DIOS». Creerle a Dios no es «positivismo», sino más bien es creer la palabra de tu padre que se preocupa por ti.
Mira, lee, CREELE: Dios te dice hoy, mi plan para ti, es de bienestar y bendición. Mi paz no es la que el mundo da, mi bendición no viene acompañada de tristeza… ¿A quién le vas a creer? escoge creerle a Dios.
Escrito por
Hermes Alberto Carvajal Recuérdalo, todos los días, una palabra de fortaleza para ti.