Confía en Dios y mantén firme en Él tu esperanza
para que Él pueda poner sobre tu oscura tempestad, templanza.
Créele de todo corazón y mantén siempre firme en Él tu mirada
para que nunca te hundas y camines sobre el fuego y el agua.
No temas, deposita en Él siempre toda tu confianza
para que Él te de las fuerzas necesarias para ganar todas tus batallas.
Aférrate a Dios y busca su Presencia para fortalecerte
para que comprendas que con su gracia nada podrá vencerte.
Tómate de la mano de Dios y nunca caerás,
pues de gloria en gloria siempre con Él andarás.
Sumérgete en su Presencia y ora, ya que Él está esperando oírte
para mostrarte su poder y muchas cosas también decirte.
Habla constantemente con Él y lograrás conocerle,
y medita diariamente en su Palabra para que puedas entenderle…
No contiendas con Él, pues siempre saldrás perdiendo
ni digas que sabes más que Él, pues estarías mintiendo;
ya que nuestro Dios es grande y perfecto en conocimiento
y Él le da sabiduría al que le busca, y al que le teme, le da entendimiento…
Dale a Dios siempre el primer lugar en todo lo que hagas
para que en todo lo que emprendas prosperes y todo bien te salga;
para que sean bendecidas tus cosechas y no las destruyan las plagas;
para que tus sueños se realicen a tiempo y sin tardanza;
para que los anhelos de tu corazón se cumplan tal como esperabas,
y para que tengas la protección de Dios, quien ganará todas tus batallas.
Aunque el mundo te quiera convencer de no confiar en el Señor;
aunque las personas te digan que Él es tan solo tu imaginación:
tú, persevera, no les hagas caso, ni dejes de confiar en el Señor,
pues cuando tú confías en el Señor, Él hace cosas que sobrepasan tu imaginación.
By: Cristian Flores