Hace unos años, en los Juegos Paralímpicos de Seattle, también conocidos como los «Juegos Olímpicos Especiales», nueve competidores se alinearon para la carrera de 100 metros.
Después de la señal, todos están ansiosos por darlo todo, terminar la carrera y ganar el premio. De pronto, uno de los chicos cayó al suelo, rodó y comenzó a llorar. Los otros ocho oyeron el grito, aminoraron el paso y miraron hacia atrás. ¡Vieron al niño en el suelo, y se detuvieron, y volvieron, todos!
Una de las chicas, que tiene síndrome de Down, se arrodilló, la besó y le dijo: «Prepárate, ahora vas a ganar». Los nueve concursantes caminaron juntos hasta la línea de meta, tomados del brazo.
Todo el estadio se puso de pie y, en ese momento, no había ojos secos. Los aplausos duraron unos largos minutos, y los que estaban allí ese día siguieron repitiendo la historia hasta el día de hoy. Porque en el fondo, todos sabemos que ayudar a otros a ganar es más importante que ganar en esta vida, incluso si eso significa reducir la velocidad y cambiar de dirección.
Porque el verdadero sentido de esta vida no es que cada uno de nosotros gane solo, sino que: ganemos juntos.
Credo Olímpico: la participación es la clave del Olimpismo
El credo olímpico es una famosa cita del barón Pierre de Coubertin, fundador de los modernos Juegos Olímpicos. Hace hincapié en que el olimpismo no se trata de ganar , sino de participar: «Lo importante no es vencer, sino participar»
Es más importante participar que ganar
Se dice que es más importante participar que ganar. Esta filosofía tiene sus raíces en el concepto de que no se puede tener éxito sin participación. Esta no es una mala manera de pensar, ya que se puede aplicar a cualquier tipo de esfuerzo. Sin embargo, ganar no es el objetivo final en todas las situaciones.
Robert Thomas dijo que sin consentimiento no se puede tener éxito. La participación es un buen punto de partida para un objetivo, y la participación de los demás es vital para alcanzarlo.
En fin, independientemente del resultado, la participación en una competición o deporte debe ser un objetivo de todos los participantes. Participar en un evento en el que, no solo lo ayuda a aprender sobre usted mismo, sino que también puede llevarlo a ganar en el futuro. También es una gran manera de aprender de sus errores y mejorar sus habilidades. Como dijo Jim Ron, aprender del fracaso es importante. Por lo tanto, es más importante participar en un evento y aceptar el desafío, que ganarlo.
Aunque pueda parecer contradictorio, ganar no es todo lo que importa en la vida. Muchas personas se enfocan en el hecho de que quieren ser los mejores y que ganar es el objetivo final. Si bien ganar puede traerte gloria y fortuna, no es tan satisfactorio si no te diviertes en el proceso. En su lugar, intente concentrarse en el hecho de que participar es importante, ya que puede conducir a una mayor felicidad.