Deja tu nombre y tu necesidad para orar por ti, no temas decirle a Dios como te sientes, Él te ama y te comprende y quiere saciar tu ser de misericordia y gracia, El desea que sientas su ternura y su amor acariciando tu alma. Este es el día de tu alegría y tu liberación.
Déjame elevar tu nombre y tus anhelos a Dios en esta oración. El hará un milagro en tu corazón.
Dios, sabes exactamente lo que mi amigo necesita emocional y espiritualmente. Llévalo de tu mano para que pueda encontrar nuevamente el equilibrio en su vida. Que en tu palabra encuentre el consuelo que tanto necesita, que a él lleguen personas que le ayuden a restaurar su corazón mostrando tu amor en cada palabra y acción.
Amén.
Ahora, lee estas palabras en la imagen de abajo y dedícaselas a Cristo Jesús con amor y sinceridad de tu corazón, mantén esta actitud durante toda la semana. ¡Bendiciones!
Dios mío, amo ver llegar la tarde,
Mirar al sol corriendo a ocultarse,
Cediendo el paso a la oscura noche,
Invitando a las estrellas a jugar.
Todo lo que has creado es bello,
como tú,
hermoso el universo, como tú, maravillosas son tus obras.
Bello también es mi destino,
Rodeado de tu bondad es
mi camino. Y mi mañana será
también bello a tu manera,
Y aunque a mí no me guste,
aunque mi voluntad no quiera,
Aceptaré lo que me des,
lo que de ti venga.
Porque tú me amas, porque
confío en ti, porque tú eres bello.
Escrito por: Hermes Alberto Carvajal