Los dolores articulares suelen ser muy molestos e incapacitantes. Solo la persona que los padece conoce que tan fuertes pueden ser y el malestar que ocasionan.
Los dolores articulares pueden aparecer a cualquier edad y de allí su causa correspondiente, que se leerá durante el artículo. Aunque básicamente existen tres clases: Los dolores por artritis o inflamación de la articulación, artrosis o desgaste de la misma y dolor por lesión o herida.
Los suplementos vitamínicos y demás medicamentos pueden ayudar a reducir los síntomas, pero no son curativos. Identificar la causa es importante, ya que el dolor es un síntoma, pero la causa es qué está causando dolor y demás sintomatología.
Clases de dolores articulares
Como se mencionó anteriormente existen tres clases de dolores. En primer lugar, se hablará del más común, el dolor por artrosis o desgaste articular. Este está presente principalmente en ancianos. Suele incrementar con el ejercicio, debe ser examinado por un médico reumatólogo y tiende a requerir fisioterapia.
El dolor tipo artritis tiende a aparecer a cualquier edad, disminuye durante el ejercicio y es consecuencia de patologías como artritis reumatoide, aunque también en psoriasis, lupus, entre otras. Asimismo, tiende a ser tratado por un médico y requiere analgésico y tratamiento específico.
La artritis en la gran mayoría de ocasiones se debe a un trastorno inmunológico donde el mismo organismo ataca las células y genera inflamación.
El dolor por lesión se caracteriza por ser intenso y requiere tratamiento traumatológico. Bien sea inmovilización, farmacológico e inclusive cirugía según sea el caso. Mientras más grande y movible sea la articulación, más complicado será el cuadro. Por ello, una lesión de hombro o rodilla en líneas generales será más compleja a la de una falange o muñeca.
Remedios naturales
Si bien los remedios naturales deben tener su respectivo soporte científico para tratar los dolores, es importante consumir alimentos que contengan antioxidantes y antiinflamatorios naturales como la vitamina D y melatonina.
- Algunas de las comidas que se pueden ingerir son las verduras, frutas completas, aceite de oliva. Evitar lácteos, a pesar de tener altas concentraciones de vitamina D, tienen otros componentes inflamatorios.
- El jengibre y ajo pueden ayudar, así que preparaciones a base de ellos son muy útiles.
- El ejercicio y la exposición a la luz solar, también son adecuados. Pero el ejercicio debe ser dirigido y programado en caso de artrosis, ya que puede ocasionar daño en la lesión.
- Lavar la articulación con baños alternados de agua tibia y fría también puede desinflamar la lesión. Importante evitarlo en una lesión cercana a la cabeza o si el paciente tiene problemas cardiovasculares.
Nunca realizar
En el caso de los dolores articulares, siempre hay algunos comportamientos que se deben evitar.
- Nunca se debe infiltrar una articulación por personal no médico y menos sin una valoración del mismo. No solo no todas las lesiones son aptas para infiltrar, sino que puede existir un mayor riesgo de lesión.
- La automedicación está prohibida, salvo sean analgésicos leves o suplementos.
- Es de vital importancia no estar aumentado de peso y en caso de realizar posiciones forzosas como cargar peso o agacharse, se debe hacer de la manera adecuada.
Los dolores articulares afectan la calidad de vida del paciente y saberlos tratar es importante para poder sobrellevar el proceso.